El Servicio de Alergología del Hospital Universitario Fundación Alcorcón, centro público de la Comunidad de Madrid, utiliza la técnica de repicadura de insecto vivo con pacientes alérgicos al veneno de abejas y avispas. Con esta prueba se consigue saber si el tratamiento de inmunización, en determinados casos, está siendo efectivo o debe modificarse o ajustarse.
La Fundación Alcorcón es el primer hospital de la región madrileña y uno de los pocos de España que desarrolla esta técnica, un procedimiento que consiste básicamente en someter al paciente, en condiciones controladas, dentro del hospital, a la picadura del insecto vivo al que es alérgico, abejas o avispas, para comprobar si el tratamiento de inmunoterapia que está realizando es realmente efectivo, o debe ajustarse.
En estas condiciones, si hubiera una reacción alérgica, se administraría tratamiento con adrenalina, corticoides y antihistamínicos además de las medidas de soporte necesarias, por lo que se elimina el riesgo que existe en el entorno no sanitario. Es decir, se realiza en pacientes en los que ya se ha diagnosticado la alergia, y que están en tratamiento con inmunoterapia, y en los que se plantea alguna duda de su eficacia real.
Por ejemplo, los pacientes que ya han experimentado picaduras, y no han tenido reacción alérgica no se incluyen en este procedimiento.
Esta prueba, además de reforzar la seguridad de los pacientes, permite eliminar su temor a hacer actividades al aire libre, puesto que comprueban el efecto de la inmunoterapia con una picadura real por lo que mejora la calidad de vida del paciente, ya que las avispas están presentes básicamente en verano, y las abejas todo el año.
Es decir, aunque la alergia en sí no es incapacitante porque tiene tratamiento, psicológicamente sí puede serlo. Además, algunos de los pacientes, por su trabajo, deben estar al aire libre y/o en entornos con estos insectos, por lo que los beneficios de esta prueba también tienen implicaciones en su entorno laboral.
El Servicio de Alergología de la Fundación Alcorcón, cuyo jefe es el doctor Miguel Ángel Tejedor, introdujo esta técnica en 2021, aplicada por la doctora Teresa Alfaya, alergóloga especialista en alergia a insectos, actual miembro del Comité de Alergia a Himenópteros de la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica y secretaria del Working Group on Insect Venom Hypersensitivity de la Academia Europea de Alergia.
Desde entonces se han realizado un total de 28 casos, que suponen más de la mitad de los pacientes en tratamiento con inmunoterapia con el veneno de estos insectos.
La prevalencia de reacciones alérgicas sistémicas por alergia a veneno de himenópteros en Europa varía entre el 0,3 % y el 8,9 % de la población general según diferentes estudios, y lo que es más importante, la mortalidad debida a estas reacciones se sitúa entre 0,03 y 0,48 muertes por 1.000.000 de personas y año.
Se calcula que en la Unión Europea hay alrededor de 200 muertes anuales por picadura de himenópteros. Respecto a España, la prevalencia de reacciones sistémicas por alergia a veneno de himenópteros se sitúa en el 2,3 % en la población general.