Un estudio realizado en España por el Grupo de Investigación Transversal en Atención Primaria (IDIBAPS), en el que colaboraron expertos de la UPF School of Management, ha revelado que el problema de las alergias no pasa exclusivamente por los síntomas físicos, sino que cada vez cobra más importancia su impacto psicologico en los menores.
Un informe del Comité Científico de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) señala que uno de cada cuatro niños en edad escolar en Europa convive con alguna alergia alimentaria, una condicion a la que la Fundación Seguridad Alimentaria y Prevención Alergias señala como la principal causa de anafilaxia en niños de 0 a 14 años.
En este contexto, los expertos aseguran que tener alergias no solo resta a los niños y a sus familias calidad de vida, sino que aumenta el riesgo de desarrollar en estos problemas psicológicos, a lo que hay que unir que los afectados suelen presentar mayores comorbilidades médicas y no médicas, tales como aislamiento o evitación de entornos, elementos y actividades, que agravan además su bienestar emocional.
En este sentido, un estudio reciente ha revelado que los niños españoles de entre 6 y 11 años diagnosticados con alergias, presentan impacto emocional y conductual. En concreto, a través de una muestra compuesta por 366 familias, se observo que los niños alérgicos tienen puntuaciones significativamente más altas en las escalas de internalización y externalización de la Child Behavior Checklist (CBCL), lo que indica una mayor prevalencia de problemas emocionales y comportamentales.
Además, sugiere que los niños con alergias tienen casi el triple de riesgo de desarrollar dificultades psicológicas en comparación con los niños sin alergias.
Este aumento de los problemas psicoemocionales puede estar relacionado con la incomodidad física, las limitaciones en las actividades diarias y la preocupación permanente por el riesgo de entrar en contacto con los elementos alérgicos, ya que no hay que olvidar que, en muchos casos, las alergias no se limitan a reacciones leves, sino que entrar en contacto con el alérgeno puede suponer complicaciones graves a nivel fisiológico y derivar en la muerte accidental en cuestión de minutos.
Estos resultados son consistentes con los encontrados en otros estudios internacionales y cuentan con el interés y aprobación de la Sociedad Española de Inmunología Clínica, Alergología y Asma Pediátrica (SEICAP).