El VII Estudio de Salud y Vida elaborado por Aegon, publicado en mayo de 2025, muestra que un 12 % de los españoles sufre alguna alergia o intolerancia alimentaria, y que un 42 % de los participantes evita algún tipo de alimento, basándose en encuestas realizadas a nivel nacional a traves de las cuales analiza los hábitos alimentarios de la población.
Estas cifras incluyen tanto a quienes lo hacen por motivos médicos como a quienes lo deciden por iniciativa propia, sin que exista una recomendación profesional.
De esta manera, el estudio señala que el 30 % de los encuestados evita alimentos por decisión personal, mientras que el 12 % lo hace debido a una alergia o intolerancia, una proporción que se mantiene estable respecto al año anterior.
Las mujeres presentan una mayor frecuencia de restricciones alimentarias por intolerancias o alergias (15,5 %) en comparación con los hombres (8,4 %); mientras que los jóvenes entre 18 y 25 años también figuran entre los grupos con más restricciones, alcanzando un 20,4 %.
Además, las personas que perciben su salud como mala tienden a evitar más alimentos, de manera que el 42,6 % lo hace por decisión propia y el 11,5 % por intolerancias.
En cuanto a los alimentos más excluidos, el marisco ocupa la primera posición, y un 24,2% de los encuestados afirma no consumirlo, ya sea por decisión propia (24,1 %) o por intolerancia (24,5 %).
La lactosa y los productos lácteos siguen en la lista con un 21,7 %, y cuando se trata solo de intolerancias, estos productos alcanzan el primer puesto con un 32,1 %.
El informe también recoge un aumento en las reacciones adversas a los cereales, de manera que este año, el 22,4 % de las personas con alergias o intolerancias señala problemas con este grupo de alimentos, mientras que el año anterior este porcentaje era del 11,7 %, lo que indica un crecimiento importante en este tipo de reacciones.
El análisis regional muestra diferencias notables entre comunidades autónomas, donde Baleares y Canarias son las regiones donde más ciudadanos tienen alguna limitación en su dieta. En Baleares, el 54,4% evita algún alimento; un 23,3 % lo hace por intolerancia y un 31,1 % por decisión propia; mientras que en Canarias, el porcentaje total es del 53,5 %, con un 11,1 % por intolerancia y un 42,4 % por elección personal.
Aragón presenta la menor proporción de personas que excluyen alimentos por motivos médicos (3,2 %), aunque el porcentaje de quienes lo hacen por decisión propia asciende al 38,8 %.
Los expertos consultados advierten sobre los riesgos de eliminar alimentos sin una razón médica clara. En este sentido, Alvar Ocano, gerente médico de Aegon, ha explicado que esta práctica puede provocar desequilibrios nutricionales y deficiencias que afectan al metabolismo y al sistema digestivo.
Por su parte, Javier López, especialista en nutrición clínica, ha subrayado la importancia de diferenciar entre tendencias alimentarias y necesidades reales para la salud individual, y recomienda consultar siempre a un profesional antes de modificar la dieta.
El informe refleja una tendencia hacia una alimentación más consciente y personalizada en España, donde muchas personas buscan mejorar su bienestar general a través de la dieta y toman decisiones sobre qué alimentos consumir o evitar. Sin embargo, los especialistas insisten en la necesidad de contar con información adecuada y asesoramiento profesional para evitar problemas derivados de restricciones innecesarias.
El estudio aporta además datos actualizados sobre las preferencias alimentarias en España, y pone en valor la importancia del seguimiento médico ante cualquier cambio relevante en la dieta.
La información recogida ayuda a comprender mejor cómo influyen factores como el género, la edad o la percepción del estado de salud en las decisiones relacionadas con la alimentación diaria.