Es habitual toparse en las redes sociales con una tendencia creciente entre las niñas, que no es otra que publicar tutoriales sobre sus rutinas de cuidado facial, una actividad que se está viralizando a través de vídeos de skincare protagonizados por menores, en los que se aplican numerosos productos de limpieza, hidratación y cremas antiedad en el rostro.
Se trata de un comportamiento que está empezando a generar preocupación entre los padres y levantando críticas de los expertos, ya que el uso de estas rutinas en pieles jóvenes supone puede suponer un claro perjuicio para las niñas.
En este sentido, la doctora Paloma Borregón, dermatóloga de la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV), no recomienda para nada la aplicación de determinados productos con alto contenido en retinol o ácido hialurónico en pieles tan jóvenes, ya que “la piel de los niños es muy delicada y al pasarnos con estos productos, puede irritarse”.
Borregón ha detallado que el retinol o ácido hialurónico resultan muy agresivos para las pieles de los niños, algo en lo que coincide con la farmacéutica Marta Masi, que ha explicado que “introducir retinol, vitamina C pura a alta concentración, ácido glicólico y muchos otros ingredientes pueden provocar alteraciones cutáneas severas que finalizan en la consulta médica en más de una ocasión”.
Así las cosas, las expertas señalan que aplicar productos que popularizan las influencers a través de redes sociales, sin seguir una pauta profesional ni una recomendación totalmente pertinente, puede convertirse en una práctica muy peligrosa, ya que para ello se debe tener conocimiento del tipo de piel que tenemos.
Además, emplear productos con ingredientes que no son adecuados aumenta la probabilidad de irritación, eccemas, dermatitis, alergias o quemaduras.
Algunos ingredientes con los que se debe tener especial cuidado, según puntualiza Masi, son “el ácido azelaico, que puede provocar una sequedad y descamación importante, y vitamina K, que puede generar reacciones de alergia especialmente en zonas más sensibles”.
En este sentido, la doctora Borregón ha señalado la importancia que tiene aplicar productos que incluyan fórmulas muy sencillas para los niños, siendo “los geles más recomendados aquellos de PH neutro, es decir, cualquier jabón básico y suave”.
Además de la higiene, la piel de los niños necesita hidratación y protección solar, por lo que Marta Masi ha insistido en los tres sencillos pasos que se deben tener en cuenta para el cuidado de la piel en niños: una limpieza suave, hidratación y fotoprotección cada mañana.
Ambas expertas han resaltado lo imprescindible que es aplicar crema solar todos los días. En este sentido, la dermatóloga Borregón incide en que las prácticas de cuidado de piel en la infancia se asocian normalmente al desarrollo de cáncer de piel; mientras que Masi ha enumerado los beneficios de la crema solar “para evitar manchas, fotoenvejecimiento, marcas de acné, flacidez y lesiones cancerígenas”.
Esta expertaa firma que la protección solar “es indiscutiblemente la mejor crema antiedad que existe y la que reduce notablemente el riesgo de desarrollar cáncer de piel años posteriores”; mientras que Borregón aconseja que es muy importante aprender a cuidar la piel desde el principio, y es completamente recomendable seguir las pautas de los dermatólogos.
En la adolescencia, como consecuencia de los cambios hormonales, la piel va sufriendo modificaciones, por lo que es bastante habitual que aumente la preocupación de las jóvenes por cuidarse el rostro y empezar a aplicar productos de maquillaje. En este sentido, Borregón insta a seleccionar maquillaje oilfree o no comedogénico, y y asegura que “la adolescencia es un momento en el que la glándula sebácea está trabajando y por eso merece la pena invertir en maquillaje un poco mejor, que puede evitar taponar los folículos y las glándulas, y reducir así la aparición de granos”.
También ha explicado que, como desmaquillante para adolescentes, lo más recomendable es el agua micelar, aunque es muy importante consultar con los dermatólogos los productos específicos, ya que “no todo vale para los diferentes tipos de pieles”.
Por su parte, la farmacéutica Marta Masi destaca que introducir determinados productos no debe depender de la edad, sino de la necesidad, el tipo de piel y la patología de la piel diagnosticada, motivo por el que "siempre decimos que es necesaria una visita al dermatólogo cada año para todos los miembros de la familia”, ha concluido.