El 30 % de los ciudadanos de Baleares padece algún tipo de alergia, superando la media nacional. Sin embargo, hasta la fecha no contaban con un servicio de Alergología en esta comunidad autónoma. Afortunadamente, la Consejería de Salud de esta Comunidad Autónoma ha dado un paso importante en la mejora de la atención a los pacientes con alergias al incorporar tres nuevos alergólogos al Hospital Universitario de Son Espases, consolidando así el primer servicio público de Alergología de la región.
Según ha explicado Ignacio Dávila, presidente de la SEAIC, “esta medida, que se completa a partir de diciembre con la contratación de un cuarto profesional y la previsión de una quinta incorporación en 2025, responde a más de una década de demandas por parte de la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC) para garantizar una atención adecuada a la población alérgica. Resultaba llamativo que en las Islas Baleares solamente hubiese un alergólogo en el Sistema Nacional de Salud (SNS) para toda la población de esta región. En este sentido, los pacientes alérgicos han sufrido una inequidad asistencial respecto a los ciudadanos que residían en el resto de España”.
La falta de un Servicio de Alergología en Baleares estaba generando importantes consecuencias, tanto para los pacientes como para el sistema de salud.
Por un lado, el presidente de la SEAIC señala que esta carencia “vulneraba” la Ley de Cohesión y Calidad del Sistema Nacional de Salud, que garantiza el acceso equitativo a los servicios médicos de todas las comunidades autónomas. En este sentido, Dávila ha explicado que “la ausencia de alergólogos en Baleares ha provocado largas listas de espera y diagnósticos y tratamientos tardíos para las enfermedades alérgicas”.
Por potra parte, el presidente de la SEAIC ha detallado que la falta de esta especialidad constituyó un aumento de costes tanto para el sistema de salud como para los pacientes, ya que sin acceso a un tratamiento adecuado en la sanidad pública, muchos pacientes se veían obligados a recurrir a la sanidad privada o a desplazarse a otras comunidades autónomas, lo que genera un sobrecoste económico adicional.
Además, esta situación también sobrecarga las urgencias en Baleares, incrementando aún más los costes del sistema sanitario.
Según el máximo responsable de la SEIAC, "la alergología es una especialidad médica reconocida, con un programa de formación MIR, pero no se estaban ofreciendo las oportunidades para que los alergólogos pudieran atender a la demanda en Baleares".
De esta manera, la falta de desarrollo de esta especialidad en las Islas Baleares no solo afectaba a los pacientes, sino que limitaba el aprovechamiento de recursos humanos altamente capacitados para mejorar la atención a los pacientes alérgicos. En este sentido, es de agradecer el esfuerzo realizado por la actual Consejería de Sanidad y la gerente del Hospital Son Espases, por cumplir el compromiso con la SEAIC recogido en el denominado Pacto del Hamilton, ha concluido Dávila.
Desde esta organizacion confirman que la creación de este primer servicio público de Alergología en Baleares es el resultado de más de diez años de esfuerzo, en los que habían solicitado insistentemente la incorporación de alergólogos en la sanidad pública.
