La alergia a la proteína de leche de vaca (APLV) es la causa más frecuente de alergia alimentaria en niños menores de 2 años, con una prevalencia global del 0,54 %, aunque con una evolución generalmente favorable, ya que la mayoría de ellos superan su alergia y desarrollan tolerancia a las proteínas de leche de vaca con el tiempo.
Basándose en esta premisa, el Estudio Presto, elaborado por Nutricia, ha revelado ahora que el 45 % de los lactantes con APLV tratados con fórmulas a base de aminoácidos suplementadas con simbióticos desarrollaron tolerancia, y solo un 9 % sufrieron infecciones que necesitaron hospitalización.
Según el Dr. Gonzalo Botija Arcos, miembro de la sección de Gastroenterología y Nutrición Pediátrica del Hospital Universitario Fundación Alcorcón de Madrid, "este estudio surge con el objetivo de investigar el desarrollo de tolerancia en niños con APLV mediada por IgE tratados con una fórmula elemental a base de aminoácidos con o sin simbióticos, siendo hasta la fecha el primer ensayo clínico de estas características".
Se trata de un ensayo clínico multicéntrico, prospectivo, aleatorizado y doble ciego en niños con APLV mediada por IgE que reciben FAA con o sin simbiótico sque ha incluido a 169 pacientes menores de 13 meses, que recibieron fórmulas elementales a base de aminoácidos suplementadas con simbióticos o sin simbióticosdurante 12 meses, tras los cuales se observó que el 49 % de los lactantes presentaban tolerancia a las proteínas de leche de vaca, una cifra que ascendió hasta el 62 % tras 24 meses.
Según ha explicado Botija, "los resultados de este estudio sugieren que, en lactantes con APLV mediada por IgE, el desarrollo de tolerancia tras el uso de una fórmula a base de aminoácidos es claramente superior al publicado en estudios previos. Además, aquellos tratados con una fórmula elemental a base de aminoácidos suplementada con simbióticos presentaban un riesgo menor de infecciones graves que precisaban hospitalización".
Según ha indicado el especialista, "el rápido aumento de los trastornos inmunomediados en los últimos años, como las enfermedades alérgicas, parece que está estrechamente relacionado con la reducción de la exposición microbiana temprana. La microbiota intestinal juega un papel crucial en el desarrollo de la respuesta inmune de la mucosa intestinal, pues su composición puede influir en el riesgo de desarrollar una enfermedad alérgica o no".
Entre las estrategias proactivas utilizadas se ha incluido el uso de productos lácteos horneados, inmunoterapia oral, modificaciones en las fórmulas, así como el uso de prebióticos, probióticos y simbióticos. De esta manera, se ha producido "una mayor comprensión de la patogenia inmunológica de la alergia a las proteínas de leche de vaca ha ido acompañada de un cambio en el manejo dietético de la misma, un asunto de vital importancia, ya que la adquisición de una tolerancia precoz, sobre todo en aquellos pacientes con cuadros clínicos graves, supondría un importante impacto en la calidad de vida del niño y sus familiares al poder eliminar las restricciones alimentarias, así como evitar el riesgo de sufrir una reacción accidental potencialmente grave", ha concluido el experto.