Parece que se caerca la primavera a pasos agigantados, y con ella las temidas alergias. Por este motivo, es conveniente ir rescatando algunso remedios naturales como las infusiones, ya que, además de los tratamientos médicos, existen este tipo de remedios que pueden ser de gran ayuda, y entre ellos, las infusiones.
Entre este tipo de infusiones que nos podrán permitir evitar, en la medida de lo posible, los primeros y desagradables síntonas de las alergias primaverales destacan:
- Infusión de menta
La menta es conocida por sus propiedades refrescantes y descongestionantes. Para preparar una infusión de menta, simplemente necesitas algunas hojas frescas de esta planta. Corta, lava bien las hojas y pícalas, retirando las partes más duras. Colócalas en una taza, vierte agua hirviendo, tapa y deja reposar durante 10 minutos. La menta, gracias al mentol, ayuda a abrir las vías respiratorias y calmar el dolor, mitigando la congestión y los estornudos. Es importante tener en cuenta que no se recomienda su consumo en embarazadas ni niños.
- Infusión de ortiga verde
Se trata de un alivio natural antiinflamatorio, ya que la ortiga verde, a pesar de su reputación urticante, es una gran aliada contra las alergias. Para prepararla, añade una cucharada de ortiga a 300 mililitros de agua hirviendo y deja reposar. Después, cuela y disfruta. La ortiga verde actúa bloqueando los receptores químicos de las histaminas, reduciendo los síntomas de la alergia gracias a sus propiedades antiinflamatorias. Esta infusión está contraindicada en caso de embarazo, hipertensión, cardiopatía o insuficiencia renal.
- Infusión de té Rooibos
Es ideal para el goteo nasal y el lagrimeo. El té rooibos se prepara añadiendo 300 mililitros de agua hirviendo al té, tapando y dejando reposar durante 5 minutos. Este té es rico en bioflavonoides, como la aspalatina y la quercetina, que interfieren en la formación de histamina y poseen propiedades antiinflamatorias, ayudando a combatir el goteo nasal y el lagrimeo. Al no contener cafeína, es ideal para cualquier momento del día, incluso antes de dormir.
Recuerda que cada organismo reacciona de manera diferente, por lo que es importante observar cómo te sientes después de consumir estas infusiones; y luego integrar su consumo con hábitos saludables como una dieta equilibrada o el ejercicio regular, para fortalecer tu sistema inmunológico.
También es fundamental mantener una hidratación adecuada, lo que ayuda a expulsar alérgenos del cuerpo. En cualquier caso, siempre que optes por las hierbas, procura que estas sean orgánicas y de buena calidad, ya que de esta manera se logrará mayor efectividad.
Al margen de las infusiones, existen una serie de remedios generales que siempre se deben aplicar en caso de padecer. Entre ellos destacan:
- Evitar la exposición a alérgenos, manteniendo siempre las ventanas cerradas durante los días de alto conteo de polen, duchándote después de estar al aire libre y usando purificadores de aire en casa.
- Realizar lavados nasales, como el uso de una Neti Pot con solución salina, que puede ayudar a limpiar las vías nasales de alérgenos y reducir los síntomas de congestión nasal
- Consumir miel en pequeñas cantidades, ya que te podría ayudar a acostumbrarte a los pólenes de tu área y reducir la sensibilidad.
- Seguir una dieta antiinflamatoria, incorporando alimentos antiinflamatorios en tu dieta, como el jengibre, cúrcuma, frutas y verduras ricas en antioxidantes. Te ayudarán a reducir la inflamación asociada con las reacciones alérgicas.
Con estos sencillos pasos paliarás en parte las opciones de que tus reacciones alérgicas sean fuertes, algo que mejorará la eficacia de las infusiones anteriormente mencionadas.