Vacunas para la alergia para disminuir la sensibilidad a los alérgenos

Vacunas para la alergia para disminuir la sensibilidad a los alérgenos

La alergia depende de la genética y el ambiente, y los inmunólogos aseguran que aunque puede desaparecer por completo en algunos casos, lo normal es que pueda permanecer, así que trabajan para mejorar los síntomas.

 

Uno de los tratamientos más adecuados es el que se lleva a cabo a través de la inmunoterapia de alérgenos, también conocida como vacuna contra la alergia, que según la Academia Americana de Alergia, Asma e Inmunología (AAAAI), es una forma de tratamiento prolongado que disminuye los síntomas de muchas personas que padecen de rinitis alérgica, asma alérgica, conjuntivitis (alergia ocular) o alergia a los insectos que pican.

Las vacunas contra la alergia disminuyen la sensibilidad a los alérgenos y a menudo dan como resultado un alivio duradero para los síntomas de alergia, incluso una vez terminado el tratamiento, lo que convierte esta técnica en un tratamiento efectivo y beneficioso para muchos pacientes.

Sin embargo, este tratamiento no es adecuado para tratar alergias alimentarias, y la mejor opción para quienes las padecen sigue siendo evitar estrictamente la comida a la que son alérgicos.

Tanto los adultos como los niños pueden recibir vacunas contra la alergia, aunque los inmunólogos recomiendan que excluir a los menores de cinco años; pero tampoco cualquier adulto puede recibir la vacuna, por lo que antes de su puesta, se deben tener en cuenta ciertas afecciones como la enfermedad cardíaca, y se deben discutir primero con el alergólogo o inmunólogo.

Entre las cuestiones a valorar destacan la extensión de la temporada de alergia y gravedad de sus síntomas; la aplicación de tratamientos alternativos; o la disponibilidad para recibir el tratamiento, ya que se requiere de un compromiso importante.

Estas vacunas son efectivas y seguras, recuerda la Academia Americana de Alergia, Asma e Inmunología, que ha comprobado que las vacunas contra la alergia disminuyen los síntomas de muchas alergias; aunque la única manera de medir realmente su efectividad es evaluar el alivio de los síntomas a largo plazo.