Desarrollan una fórmula a base de huevos no fecundados de erizos de mar para tratar las alergias

Desarrollan una fórmula a base de huevos no fecundados de erizos de mar para tratar las alergias

La bióloga y científica argentina Tamara Rubilar ha desarrollado una fórmula basada en huevos no fecundados de erizos de mar, que contiene propiedades antioxidantes que permiten potenciar la salud humana y luchar contra las alergias severas, como la que padece su hijo. 

 

Una necesidad familiar condujo a esta científica por el universo de la acuicultura donde encontró un superalimento con propiedades medicinales basado en huevas no fecundadas de erizos de mar. En este sentido, Teresa Rubilar,  que es investigadora en el Centro para el Estudio de Sistemas Marinos (Cesimar – Cenpat) en el Centro Nacional Patagónico (CCT Conicet - Cenpat),  ha explicado que “la serendipia de la vida hizo que los erizos pudieran darme una herramienta clave para ayudar a mi hijo menor. Padece una enfermedad autoinmune que le desencadena alergias alimentarias y respiratorias muy severas desde que nació”.

Su formación científica fue vital para ensayar respuestas al problema de alergia severa que presentaba su hijo. “Estaba muy mal y las soluciones que nos proporcionaban no daban resultados favorables, ya que tenía niveles bajos de glóbulos blancos y fuertes alergias a diversos alimentos" ha comentado la bióloga.

El tratamiento que los médicos le recetaron incluía el uso de corticoides, pero el problema es que la toma a largo plazo de estos fármacos no es inocua y afecta el desarrollo de los chicos. “Con mi marido no nos podíamos conformar, así que en mis ratos libres me puse a leer bibliografía y a contactarme con inmunólogos para buscar qué otra cosa podíamos hacer”, confiesa la científica, que combina pasión por el mar y por el laboratorio.

Para entonces, su background profesional se había consolidado con un trabajo de años estudiando a los equinodermos, un grupo de animales que comprende a los erizos, estrellas y pepinos de mar. Fue entonces cuando indagó diferentes opciones para disminuir alergias e inflamaciones, para descubrir que los antioxidantes podrían ser la clave para mejorar la calidad de vida de su hijo, al que había que disminuir la inflamación celular y modular su sistema inmune.

En este camino, buceó entre moléculas antioxidantes de origen marino y encontró la respuesta: huevos no fecundados de los erizos de su laboratorio, de los que comprobó que estaban repletos de espinocromas saludables. “No eliminamos los remedios tradicionales sino que hicimos cambios paulatinos hacia la utilización de compuestos naturales (las huevas de los erizos) que resultaron ser excelentes y mejoraron notablemente su calidad de vida”, puntualiza.

Los erizos de mar son animales que cumplen roles ecológicos muy importantes para los fondos marinos, pero estaban poco habían sido escasamente estudiados y había un vacío de conocimiento muy grande en el área. Así las cosas, Tamara detectó una oportunidad y los estudió en profundidad hasta comprobar que las huevas de los erizos de mar tienen poderosos antioxidantes que permiten potenciar la salud humana.

La doctora hja explicado que “las huevas tienen muchas espinocromas, unas moléculas con beneficios para la salud que se pueden obtener y utilizar de manera sostenible económicamente y sustentable ambientalmente, por lo que el desarrollo de la tecnología acuícola que hicimos desde Promarine con el equipo de investigación del Conicet fue clave”.

Las espinocromas son antioxidantes marinos por excelencia que están presentes en los erizos de mar y la especie con la que trabaja, Arbacia düfresnii, las acumula en sus huevos.

Asimismo, actúan en diferentes niveles en el metabolismo celular, lo cual hace que tengan múltiples beneficios fisiológicos, entre los que destaca que disminuye el estrés oxidativo o la cantidad de radicales libres. “Para que los beneficios de la ciencia lleguen a la sociedad era necesaria la creación de una empresa de base tecnológica del Conicet que pudiera realizar estas acciones. Junto con un gran equipo que conforma Promarine logramos hacer tangible este sueño. Estoy convencida de que elegí la profesión correcta. El mar es la fuente del conocimiento que nutre mi investigación y donde nació Promarine”, ha explicado la científica argentina.

De esta manera, en agosto de 2021 creó Promarine Antioxidants, una compañía que nació al amparo de investigación y desarrollo de tecnología acuícola con el propósito de potenciar la salud humana mediante la ciencia y la biotecnología,y que desarrolla antioxidantes marinos únicos, naturales y sustentables. Ubicada en Puerto Madryn, Chubut, la compañía cuenta con un equipo de especialistas y científicos que trabajan bajo el concepto de economía circular y acuicultura restaurativa.

Se trata de una start-up de base tecnológica donde se crean insumos naturales antioxidantes marinos no extractivos y sustentables, con apoyo del Conicet, a partir de las huevas no fecundadas. “Creamos productos en base a los huevos de erizo de mar para potenciar la salud humana. Es un alimento distinto a todo lo que conocemos porque usamos ingeniería en todos los procesos, nos basamos en ciencia, somos sustentables y usamos el principio de economía circular”, ha explicado Lucía Barja, cofundadora de Promarine Antioxidants.

El conocimiento sobre los beneficios de los erizos de mar es muy antigua,y  se tiene concimiento de que ya en el año 1600, se utilizaba esta materia médica para la medicina en China, como sustancia para disminuir inflamación, el dolor en las articulaciones y otros usos.

Por otro lado, en muchos lugares del mundo, los erizos de mar son considerados un alimento gourmet por su sabor y propiedades biológicas.