La Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) ha activado una alerta sanitaria por la alta presencia de histamina en algunas latas de atún en aceite de girasol vendidas en España, una situación que podría poner en riesgo a las personas que la consuman.
Se trata de varios lotes distribuidos en La Rioja y en la Comunidad Valenciana de latas de atún en aceite de girasol de la marca Montey y Didilo, en formato de 1 kilo, con fecha de caducidad para el 8 de febrero de 2027, y número de lote afectado es el L03922JC.
Desde la AESAN han lanzado una nota en la que apunta que «ee recomienda a las personas que tengan en su domicilio productos afectados por esta alerta, se abstengan de consumirlos y los devuelvan al punto de compra».
Desde esta aganecia han detallado que la histamina es una sustancia inflamatoria perteneciente al grupo de las aminas biógenas, que se produce naturalmente en el cuerpo, para añadir que se trata de un potente vasodilatador que puede ser liberado en reacciones alérgicas frente a alérgenos como el polvo, el polen o el moho.
Además, desde este organismo han explicado que también puede generarse por la acción de microorganismos sobre la carne de algunos alimentos, sobre todo en el caso del pescado.
Según explica AESAN, las dos causas principales de intoxicación histamínica son la manipulación antihigiénica de pescado o su conservación a temperaturas inadecuadas, de manera que al consumir productos en estas condiciones es cuando pueden darse casos graves de intoxicación por histamina.
Estos cuadros pueden contar con múltiples síntomas, tales como trastornos respiratorios graves similares a un episodio de crisis alérgica, náuseas, calambres, espasmos bronquiales o sofoco. En cualquier caso, tal y como apuntan desde AESAN, «la mayoría de los casos se trata de cuadros poco graves que remiten de 12 a 24 horas».
Además de estos síntomas, también se describen como posibles efectos la diarrea, el enrojecimiento y edema facial, el dolor de cabeza y el picor, síntomas que por norma general, suelen aparecer en un periodo que va desde los pocos minutos hasta las tres horas después de la ingesta de un alimento con altos niveles de histamina.
Hay muchos alimentos que son ricos en histamina, tales como el alcohol, los pescados, las carnes, los productos enlatados, los lácteos, la fruta, la verdura y las legumbres, entre muchos otros. Sin embargo, salvo que se trate de un alimento con una presencia mayor de lo normal por algún tipo de intoxicación, como en este caso el atún en aceite de girasol contaminado, su consumo no debería suponer ningún problema para las personas, hasta el punto de que en la mayoría de casos de intoxicación la cantidad de histamina en el alimento consumido tiene que ser muy alta, es decir, bastante por encima de lo normal.