El conocido intérprete Enrique Bunbury, conocido principalmente por su trayectoria al frente de la banda Héroes del Silencio, ha explicado que, después de someterse a diversas pruebas médicas, por fin conoce el motivo de sus problemas con la voz, y no es otra que una intolerancia al glicol, la sustancia química que se utiliza para producir la niebla artificial, habitual en los espectáculos musicales.
Esta situación vendría a explicar el hecho de que el músico sólo se viera afectado por problemas de voz sobre el escenario y que, en cambio, fuera de él se encontrase perfectamente, como solía explicar, algo que nadie acababa de entender.
El glicol es un compuesto químico sintético obtenido a partir de la reacción del agua con el óxido de etileno. Su nombre, que procede del idioma griego, significa dulce, por una de las características más evidentes de este producto: su sabor. Es transparente, no produce olor, tiene bajo peso molecular, y además, se puede disolver en otros compuestos orgánicos.
Según su tipo, los glicoles pueden tener diferentes aplicaciones. Algunos se pueden usar para fabricar poliéster, anticongelante para vehículos, lubricante, plastificante, excipiente para la industria cosmética y conservante de soluciones para cuidado personal como cremas y perfumes.
En este caso, el glicol que estaba provocando los síntomas del cantante se empleaba en las máquinas de niebla artificial que se usan en los espectáculos musicales, ya que generalmente, estos dispositivos se producen vaporizando agua mezclada con glicol.
En algunas personas, la exposición a largo plazo puede provocar síntomas como irritación ocular, disfonía (problemas en la voz), molestias en la garganta, o incluso problemas más graves como asma o bronquitis en personas que a priori no padecen ningún trastorno respiratorio relevante.
El cese de la exposición puede lograr la desaparición de los síntomas, por lo que conocer la causa con exactitud, podría facilitar el regreso de Bunbury a los escenarios.