La falta de precipitaciones durante la primavera y las altas temperaturas sufridas están modificando el mapa de polinización, afectando sobre todo a la calidad del aire, que viene cargado de pólenes y de partículas contaminantes; lo que está provocando un aumento de los episodios alérgicos y su intensidad.
Según los especialistas de la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (Seaic) "nos encontramos en plena irrupción de las alergias más frecuentes durante la primavera, las relacionadas con las gramíneas y el olivo".
Según ha explicado la doctora Clara Isabel Pérez Padilla, jefa de servicio de alergología de los hospitales Vithas Xanit Internacional y Vithas Málaga, "en Andalucía y en el área mediterránea, la polinización comienza siempre un poco antes que en el resto, por las altas temperaturas", y ha añadido que, además, "se está produciendo una floración más intensa del olivo".
En cuanto a las gramíneas, los alérgicos se están enfrentando a una primavera leve, pero la alergóloga ha puntualizado que "al no haber precipitaciones, la floración de estas es mucho menor y existen bajos niveles de polinización, por lo que los alérgicos a las gramíneas lo van a notar menos".
El peor de los escenarios para un alérgico es que no llueva durante la primavera, motivo por el que desde el servicio de alergología del Hospital Vithas Xanit destacan la importancia de la adherencia al tratamiento en alergias respiratorias y explican que las vacunas se convierten en el único tratamiento que consigue interferir en la evolución natural de estas alergias, reduciendo los síntomas e impidiendo que el proceso empeore.
Algunos de los síntomas que puede tener un paciente con alergia son: picor nasal, ocular, en el paladar e incluso picor de oídos, acompañado en la mayoría de los casos de mucosidad, congestión nasal y estornudos; pero el enrojecimiento de los ojos, el lagrimeo e incluso la formación de ampollas o bolsas pueden ser otros síntomas derivados de una alergia.
De esta manera, "ante la presencia de algunos de estos síntomas, se recomienda que el paciente acuda al hospital para que el alergólogo valore su caso y determine si precisa tratamiento de inmunoterapia y así prevenir los síntomas y crisis durante la primavera", ha explicado Pérez Padilla.
Para sobrellevar la alergia primaveral la doctora ha explicado que "es importante evitar las estancias en el campo o en zonas con abundante vegetación, sobre todo en los días con viento. También se recomienda dormir con las ventanas cerradas y, si se viaja, hacer esta misma operación con las ventanillas del coche y empleando filtros antipolen en la ventilación del vehículo", al tiempo que ha recomendado "el uso de gafas de sol y evitar la exposición a irritantes inespecíficos como humos, polvos u olores fuertes también puede ayudarnos a sobrellevar mejor la alergia".