La incidencia de las alergias es cada vez mayor debido a la contaminación del aire o al propio cambio climático son importantes agravantes, y en la actualidad no existen muchos tratamientos para combatir sus molestos síntomas. En este contexto, hay una terapia natural que está demostrando ser muy eficaz: la haloterapia.
Se trata de un método basado en respirar micropartículas de sal que garantiza un alivio de los síntomas e impide la reaparición de las alergias haste en un 80 % de los casos.
Existen numerosos puntos donde someterse a esta terapia, y entre ellos destacan los centros de Salt Room, diseñados para mejorar los cuadros alérgicos de adultos y niños de forma natura, que cuentan con la tecnología más avanzada, y en sus cuevas de sal se combina la comodidad de un spa con los efectos de un centro de tratamiento de la máxima calidad.
Según la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC), en los últimos tiempos se ha incrementado la prevalencia y severidad de la alergia invernal, un fenómeno que en parte se debe a la proliferación de las plantas arizónicas y los cipreses que liberan polen de enero a marzo, lo que suele provocar los casos de picor en los ojos y la nariz durante esta época.
La haloterapia es un tratamiento que ya está reconocido como terapia clínica en Estados Unidos, Canadá, Italia e Inglaterra, mientras que en Rusia forma parte del sistema de salud oficial, y consiste en respirar en un ambiente saturado por micropartículas de sal de origen mineral.
Esta terapia está reconocida como una terapia natural no farmacológica que resulta muy eficaz para abordar la alergia, ya que la acción del aire rico en sal tiene un efecto antiséptico, antiinflamatorio y osmótico sobre los fluidos de los tejidos del organismo lo que permite la ampliación y limpieza de las vías respiratorias.
De esta manera, los alérgenos son expulsados del sistema respiratorio y se desbloquean tanto los bronquios como los bronquiolos.
Las micropartículas de sal que se respiran favorecen la expectoración y disminuyen la mucosidad, la inflamación y la hiperactividad bronquial. Además, al ser antiséptica, la sal contribuye a eliminar virus y bacterias.
Además, se trata de un método muy recomendable para personas asmáticas o que padezcan bronquitis, EPOC o tos poscovid, entre otras patologías respiratorias.