El uso de formulas lácteas hidrolizadas, en vez de fórmulas vegetales, es un factor clave para acelerar el desarrollo de tolerancia en los niños que sufren alergia a la proteína de la leche de vaca.
Ésta es la principal conclusión de una investigación conjunta desarrollada por el Instituto de Productos Lácteos de Asturias (IPLA), y los hospitales Universitario Central de Asturias (HUCA), de Cabueñes (Gijón) y de San Agustín (Avilés) que ha recibido el XIV Premio internacional "Hipócrates" de investigación médica sobre nutrición humana, convocado por la Fundación Real Academia de Medicina y Cirugía del Principado de Asturias.
Bajo el título "Microbiota y parámetros fecales de niños con alergia a la proteína de la leche de vaca no mediada por IgE tras dieta de exclusión láctea", esta investigación, que ha supuesto dos años de trabajo, ha determinado que la microbiota intestinal desempeña un papel fundamental en el desarrollo de tolerancia frente a este tipo de alergia.
La microbiota intestinal "depende directamente de la alimentación" de los pequeños, ha subrayado Susana Delgado Palacio, investigadora del IPLA y responsable del trabajo. "La dieta se convierte en un actor fundamental que puede ralentizar o acelerar el desarrollo de tolerancia ante este tipo de alergia en los menores", ha añadido.
Los autores del trabajo han analizado muestras fecales de niños con alergia a la proteína de la leche de vaca no medida por inmunoglobulina E (IgE) con el objetivo de buscar marcadores que ayuden en el pronóstico del desarrollo de tolerancia. Esta alergia, destaca la investigadora, es diferente a la que comúnmente se conoce como intolerancia a la lactosa, "y no existen productos específicos en el mercado para estos niños a partir de los dos años de edad".
Según la investigación, la tolerancia a la proteína de leche de vaca -que en la mayoría de los afectados se produce a partir de los dos o tres años de edad- depende de la microbiota intestinal y ésta, a su vez, de la alimentación. A través de un seguimiento de niños que padecen esta alergia, los expertos han concluido que los que toman hidrolizados lácteos (fórmulas infantiles de base láctea en las que las proteínas están más degradadas) desarrollan antes la tolerancia que los niños que excluyen totalmente de su dieta estos productos, sustituyéndolos por alternativas vegetales como lo que comúnmente se denomina leche de soja o de arroz.
