Tras conocer el éxito gracias a una carrera exitosa como actriz, hace ocho años Jessica Alba se retiró casi por completo del mundo de la interpretación para dedicarse en cuerpo y alma a su papel de madre.
Sin embargo, durante ese parón la actriz ha encontrado una nueva e inesperada pasión debido a los problemas de alergia a ciertos químicos que sufren tanto ella como una de sus pequeñas en sus primeros años de vida.
Esta situación le animó a crear una línea de productos de limpieza y para el cuidado del bebé no tóxicos y ligados a un tipo de consumo más ético y respetuoso con el medio ambiente.
De esta manera, desde 2011, la actriz ha conseguido levantar todo un imperio gracias al olfato para los negocios que, curiosamente, adquirió gracias a su trabajo como actriz.
En la actualidad, Jessica continúa adelante con su negocio al mismo tiempo que se prepara para la llegada de su tercer retoño. "Sí que tenía miedo de perder mi propia identidad al convertirme en mamá, pero en realidad ha conseguido que me vuelva más fiel a mí misma. Y es bueno que las niñas vean que su madre tiene otras opciones; con un poco de suerte se les pegará algo de lo que hago", ha reflexionado sobre las ventajas de ser una madre trabajadora.
