Cuando el sistema inmune que protege nuestro cuerpo entra en contacto con una sustancia que le hace reaccionar excesivamente, lo que se denomina un alérgeno, se producen una serie de reacciones que liberan una sustancia que se encarga de avisar a todo el organismo de la presencia del alérgeno. Esta sustancia es la conocida histamina y una gran cantidad de tratamientos que se utilizan en las alergias están centrados en bloquear a este transmisor.
El blog tecnológico Billion Bytes ha enumerado las principales opciones de los alérgicos para sobrevivir a la primavera y a las distintas alergias que llegan con esta estación:
1º.- Controla el nivel de polen con una aplicación. Existen multitud de aplicaciones que te avisan de los niveles de polen de tu localidad. La concentración de polen es el número de gramos por metro cúbico por lo que en épocas de mayor concentración deberías evitar parques y zonas ajardinadas, es más, si viven en el campo, no sería mala idea que te hicieras con una máscara antipolen. Según la Universidad de Oregón en EEUU, el momento del día con los niveles más altos de polen es entre las 5 y las 10 de la mañana. Un motivo más para quedarse durmiendo hasta tarde. Consulta Apps para conocer los niveles de polen.
2º.- Sigue un tratamiento para tu alergia. Es fácil controlar los síntomas de la alergia primaveral si sigues correctamente el tratamiento que te ha pautado tu alergólogo. Si aún no has consultado con uno y te automedicas, recuerda que es necesario que busques consejo para que identifiquen que alergia padeces y te pauten el mejor tratamiento posible. Pero, no sólo de antihistamínicos y sprays para la rinitis vive el alérgico, un tratamiento con vacunas puede resolver el problema para siempre o reducirlo muchísimo.
3º.- Deja tus zapatos en la puerta. Has estado caminando toda la tarde por la calle, el polen se deposita en el suelo y luego en tus zapatos. Lo lógico es dejarlos en la entrada para no esparcirlo por toda la casa.
4º.- Cambia los filtros antipolen del coche. Prácticamente todos los coches modernos tienen filtros antipolen con los que filtrar el aire que llega de la calle al habitáculo de tu vehículo. Normalmente, en las revisiones periódicas de los fabricantes los cambian cada cierto tiempo, pero ¿sigues haciendo estas revisiones? Consulta con tu mecánico habitual para cambiarlos antes de que se saturen y ya no sean capaces de filtrar más polen.
5º.- Cierra las ventanas y enciende el aire acondicionado. Sabemos que el aire de la calle contiene altos niveles de polen y otros contaminantes varios... una buena estrategia para dejarlos fuera de casa es cerrar las ventanas y conectar el aire acondicionado. Los aires acondicionados filtran el aire entrante y, si te has gastado el dinero adecuadamente, es posible que incluso tengas instalado un filtro electrostático, mucho más eficiente que los clásicos.
6º.- Reduce los niveles de humedad en casa. Para una persona alérgica es importante mantener los niveles de humedad por debajo del 60 %. Niveles más altos de humedad pueden causar un aumento del nivel de moho en el aire, un alérgeno muy común. Es interesante disponer de un deshumidificador, o de un aparato de aire acondicionado que incluya esta función.
7º.- Quita las alfombras y usa la aspiradora. Las alfombras son el peor enemigo del alérgico, deshazte de ellas, ya que acumulan grandes cantidades de ácaros, polvo y polen. Esto tambien se puede aplicar a las cortinas. Es necesario sacar las alfombras de casa y pasar la aspiradora con frecuencia. Si la aspiradora es de buena calidad y contiene filtros HEPA o similares, muchísimo mejor.
8º.- Lava la ropa de cama al menos una vez por semana. Los ácaros se alimentan de las células de descamación de tu piel, que entre otras cosas forma la mayor parte del polvo visible en una casa. Estos ácaros son una fuente importante de alérgenos, que junto con el polen pueden hacer que pases una primavera complicada. Cambia la ropa de cama al menos una vez por semana, debes lavarla con agua caliente ya que así se eliminan todos los ácaros.
9º.- Usa fundas de colchón antiácaros. Las fundas de colchón antialérgicas son una gran ayuda para controlar el ambiente de nuestra habitación. Ayudan a reducir el número de ácaros en el ambiente ya que están fabricadas con tejidos no porosos que evitan que permanezcan en el colchón aunque se cambie de sábanas. Las de microfibra de poliéster son las mejores.
10º.- Lávate las manos y el pelo. Lavar las manos con frecuencia las mantiene limpias de alérgenos, también es importante mantener limpio el pelo, preferiblemente de noche ya que así evitamos aportar ácaros y polen a la cama.